Violencia de género
Si crees que puedes estar sufriendo violencia, estoy aquí para ayudarte
La violencia en sus diferentes manifestaciones atraviesa toda la sociedad. Las mujeres y hombres suelen ser objeto y sujeto de violencia, pero las estadísticas muestran que las mujeres por su situación de sumisión y el vivir en un ambiente patriarcal con más frecuencia se transforman en víctimas de violencia doméstica, ambiental, laboral, estructural y coyuntural.
Si bien la sociedad debe escuchar, pensar y hablar respecto de la violencia ejercida contra las mujeres, sabemos que para ti, que estás sufriendo violencia de género en mayor o menor grado, no es suficiente. Es el acompañamiento psicológico lo que puede apoyarte y conducirte a que logres el empoderamiento que requieres para dejar de vivir este tipo de violencia.
Cuando hablas con las amigas, con abogados o con otras personas, muchos hacen énfasis en que denuncies y esto es importante, pero ¿estás en condiciones de hacerlo? ¿estás lista para denunciar y enfrentarte a las consecuencias reales o imaginadas? Quizá aún no encuentras la fuerza para hacerlo, quizá no quieres denunciar por múltiples razones, quizá la solución que buscas es otra y no sabes con claridad cuál es.
Seguramente has escuchado estas frases:
- “A las mujeres les gusta”
- “Lo hago por tu propio bien”
- “Ella debe entender como deben ser las cosas”
- “Cuando una mujer dice “no” en realidad quiere decir “si”
- “Las mujeres son exageradas, generalmente no saben lo que quieren, son mentirosas, hay que ponerles límites”
- “Bueno…se me fue la mano…no va a volver a pasar”
- “Estás exagerando…no fue para tanto”
Estas expresiones de protagonistas de hechos violentos van desde la indiferencia, explicaciones rápidas, crítica, censura, justificaciones y muchas otras razones que dan quienes ejercen violencia de género
Es el momento en que seas tú quien decidas, la terapia con personas especialistas en el tema, que lo han estudiado durante años puede llevarte a que ahora seas tú la protagonista de tu vida y dejes de ser la víctima de alguien que se arroga el derecho de maltratarte.